Es “inminente” la firma del decreto que exime el aguinaldo de Ganancias.

Así lo anticiparon a Cronista.com fuentes seguras del Palacio de Hacienda y de la Casa Rosada, ante la inquietud que despertó en medios sindicales la demora de su publicación en el Boletín Oficial. La tardanza, si se extiende, no es inocua para algunas empresas, según un tributarista.



Una fuente del Palacio de Hacienda dijo ayer a Cronista.com que es ‘inminente‘ la publicación en el Boletín Oficial del decreto que exime del pago de ganancias en el medio aguinaldo de diciembre a los trabajadores que cobren un SAC de hasta $15.000. La misma confirmación partió de otra fuente oficial, esta vez de Casa Rosada. El aviso viene a cuento a raíz de que distintos voceros gremiales comenzaron ayer a llamar la atención acerca del dato de que, pese a la confirmación que había hecho el propio Prat-Gay de que el SAC de diciembre no tributaría ganancias en ciertos niveles salariales, aún no está publicado el decreto que oficializa esa decisión, lo que despertó suspicacias en el contexto del clima enrarecido que se vive entre el oficialismo y la oposición por el debate sobre el llamado ‘impuesto al salario‘.

La eximición del pago de Ganancias en el medio aguinaldo de diciembre no fue, hasta ahora, objeto de una comunicación, lo que se dice, nítida. El primer aviso de la eximición fue el 12 de octubre, en una conferencia de prensa encabezada por el ministro de Trabajo, Jorge Triaca y el vicejefe de Gabinete, Mario Quintana.

El contexto del anuncio fue el del pacto con la CGT, que entre otras cosas satisfacía esa reivindicación como prenda de paz con la central obrera para frenar el meneado paro general, que primero se demoró, luego se anunció sin fecha y luego pasó a mejor vida canjeado, además, por la “sugerencia” del bono de fin de año, un beneficio que algunas empresas pagarán y otras no, debido a que no reviste carácter obligatorio, según rápidamente se encargaron de advertir los voceros empresarios.

En ese momento, el Gobierno especificó que la eximición total del impuesto sería para los aguinaldos de hasta $ 15.000; los que cobren más, estarían eximidos hasta esa cifra pero tributarían por el excedente; y los que tengan salarios brutos mayores a $ 55.000, pagarían por el total del aguinaldo, informaron.

Pasó, sin embargo, más de un mes del anuncio y no hubo decreto, ni nuevas declaraciones oficiales al respecto. De hecho, cuando el 22 de noviembre Prat-Gay confirmó en la conferencia de la UIA que habría eximición, no precisó, ni confirmó, el tema de los topes salariales ya anunciados. “Esto ya está acordado en función del nivel salarial. Ya lo van a conocer cuando salga la norma pero los argentinos de ingresos medios ya saben que pueden contar con ese dinero a fin de año”, dijo el funcionario en diálogo con la prensa.

La especulación en torno al porqué de la demora remite al nuevo escenario que se generó con el proyecto opositor de reforma del impuesto que tuvo media sanción en Diputados. Así, se especuló, incluso, que si el Gobierno se veía obligado a vetar la norma si llegase a ser aprobada tal cual en el Senado, prefería guardarse alguna novedad respecto de la eximición de Ganancias en el aguinaldo para tratar de edulcorar la poco simpática decisión.

La demora en publicar el decreto no sería totalmente inocua para algunas empresas. Según el tributarista Alberto Mastandrea, de BDO ARgentina, "lo ideal sería que el decreto salga antes del 20 de diciembre", que es cuando la mayoría de las empresas pagan el aguinaldo, según dijo a Cronista.com. Aclaró, sin embargo, que aquella empresa que decida pagar el SAC antes de esa fecha, o en los próximos días, deberá hacerlo con el cargo de Ganancias para sus empleados, ya que no llegará a tiempo para excluirlo de la liquidación. Eso le acarreará algún tipo de perjuicio. "Va a tener que devolverle al trabajador lo que le retenga tras la publicación del decreto. A partir de ahí, la devolución que tenga que hacerle la AFIP no será necesariamente inmediata y por lo tanto la compañía deberá financiar la devolución del cobro que le hizo al trabajador".

Fuente: El Cronista

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